Los restos íberos encontrados denotan la antigua población de estas tierras. En época romana con el paso de "La Via Augusta" por Vilanova d'Alcolea se crea la estación romana de "Ildum" y se asienta de manera definitiva la población. Los árabes por motivos defensivos trasladan la población a un altozano, rodeándola de murallas y edificando una pequeña torre, de ahí el topónimo Alcolea. Los cristianos conquistan la población en 1235, en 1237 Blasco de Alagón le Carta Puebla, a la que seguirá en 1244 una segunda por el comendador de la Orden de Calatrava. En 1293 pasó a manos de la Orden del Temple que la adhirió al Castillo de Peñíscola, dotándola de condición de villa y llamándose desde entonces Vilanova d´Alcolea.
Los cultivos tradicionales de la zona son propios de las tierras de secano como algarrobos, almendros, olivos y viñedos; aunque de unos años a esta parte se está desarrollando en algunas zonas el cultivo de cítricos. También posee importancia económica la ganadería sobre todo la de tipo porcino y avícola. Población valenciano-hablante.
De las antiguas construcciones árabes todavía podemos ver algunos lienzos de muralla diseminadas por sus calles. Como monumentos más importantes de la población destacaremos la iglesia parroquial dedicada a San Bartolomé, construida en el s.XVII, con importantes remodelaciones del s. XVIII (su bella portada clasicista está fechada en1740) posee un elegante campanario en el que destaca su parte superior y un bello retablo barroco (s. XVIII) obra de los hermanos Capuz. El otro monumento de interés es el Calvario, construido aprovechando la pendiente de la colina sobre la que se asienta la población, guarda en algunas hornacinas de sus estaciones piezas de cerámica de L´Alcora y Onda del s. XVIII. El agradable paraje desde el que se disfruta de una buena vista tiene como elemento primordial la ermita que es obra de finales del s. XVIII y principios del s. XIX, estando decorada con interesantes frescos del pintor morellano Joaquín Oliet.
Paisaje rural, mediterráneo, de calles estrechas y sabor tradicional.
Medio Social
Los cultivos tradicionales de la zona son propios de las tierras de secano como algarrobos, almendros, olivos y viñedos; aunque de unos años a esta parte se está desarrollando en algunas zonas el cultivo de cítricos. También posee importancia económica la ganadería sobre todo la de tipo porcino y avícola. Población valenciano-hablante.
Recorrido urbano
De las antiguas construcciones árabes todavía podemos ver algunos lienzos de muralla diseminadas por sus calles. Como monumentos más importantes de la población destacaremos la iglesia parroquial dedicada a San Bartolomé, construida en el s.XVII, con importantes remodelaciones del s. XVIII (su bella portada clasicista está fechada en1740) posee un elegante campanario en el que destaca su parte superior y un bello retablo barroco (s. XVIII) obra de los hermanos Capuz. El otro monumento de interés es el Calvario, construido aprovechando la pendiente de la colina sobre la que se asienta la población, guarda en algunas hornacinas de sus estaciones piezas de cerámica de L´Alcora y Onda del s. XVIII. El agradable paraje desde el que se disfruta de una buena vista tiene como elemento primordial la ermita que es obra de finales del s. XVIII y principios del s. XIX, estando decorada con interesantes frescos del pintor morellano Joaquín Oliet.
Paisaje
Paisaje rural, mediterráneo, de calles estrechas y sabor tradicional.