Es el segundo Ayuntamiento documentado de la ciudad de Vinaròs. Originalmente la casa de la villa tenia acceso directo desde la calle, por una escalera de piedra con mucha pendiente emplazada en el exterior. Estaba formado por una sola sala de reducidas dimensiones con un armario de madera para salvaguardar los privilegios, libros y papeles del Concejo. La sala también era utilizada por la justicia, para celebrar las audiencias y, en ocasiones, era utilizada como cárcel de “personas notables”. La hornacina que hay en la fachada está dedicada a santo Domingo de Guzmán (año 1722). Destaca en la fachada una ventana de tradición y el escudo de los Alós con una ala dentro del rombo. 

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