El 17 de enero se celebra San Antonio, patrón de la población. Tradicionalmente, se realizaba la popular subasta de congletes, típicos pasteles realizados por las manos expertas de las mujeres de la población en el horno mudéjar del pueblo, tras la elaboración, se subastan las pastas en publico, donde todo el mundo puede participar y saborear las exquisitas pastas. Dado lo crudo del invierno y las fechas, poco propicias para la realización de la mencionada fiesta, la elaboración y subasta de los congletes, se ha trasladado a la segunda semana del mes de Agosto. No perdiendo la tradición de la bendición de animales, se sigue celebrando en la citada fecha.